¿Quieres tener tu propio huerto en casa? Esta puede ser una increíble actividad de entretenimiento o de relajación para hacer en nuestro tiempo libre. Además, nos permite tener acceso a alimentos frescos y saludables sin movernos de casa.
Aunque pueda parecer complicado, en realidad es bastante sencillo crear tu propia huerta en casa. En este artículo, te damos algunos consejos y pasos para que te sea aún más sencillo comenzar.
8 consejos que necesitas para crear tu mini huerto en casa
Como hemos comentado anteriormente, tener un huerto en casa además de ser más conscientes en cuanto al origen de los alimentos y a hacernos más exigentes sobre factores socmo la seguridad alimentaria, nos ayuda a reducir nuestra huella de carbono al evitar el transporte de alimentos desde largas distancias.
También es una actividad perfecta para desarrollar en familia para enseñar responsabilidades a los más pequeños y una increíble forma de conectar con la naturaleza, especialmente, si vivimos en entornos muy urbanos y no tenemos casi contacto con el ambiente rural.
Te puede ayudar a la decoración del jardín creando un ambiente cálido y acogedor. A continuación, te contamos todo lo que necesitas para montar tu huerta en casa:
1. Encuentra un lugar adecuado
Lo primero que necesitas es pensar el lugar donde vas a montar tu huerto. Puede ser un pequeño espacio en tu balcón, terraza, patio, o incluso un rincón en tu casa donde tengas luz natural y directa. Esto es importante, asegúrate de que el lugar que elijas tenga la suficiente luz solar, al menos, 6 horas y si puede ser con una orientación hacia el sur o suroeste mejor ya que las plantas necesitan esta luaz para tener energía realizando la conocida fotosíntesis.
En este apartado también hay que pensar en esta disponibilidad de la luz en las distintas épocas del año ya que, por ejemplo, en verano tendremos una trayectoria de sol elevada mientras que en invierno puede que no haya nada de sol. Aunque es cierto que existen espacios con la temperatura perfecta durante todo el año como son los invernaderos.
2. Elige las plantas adecuadas
Elige las plantas que quieres cultivar en función del espacio disponible y, como hemos comentado en el apartado anterior, en función del clima de tu zona y de la disponibilidad de sol. Algunas plantas son más adecuadas para el cultivo en macetas, como lo son los tomates, lechugas, pimientos, hierbas aromáticas y fresas. También puedes optar por plantar semillas.
3. Prepara el suelo
Si vas a utilizar un terrero de tu jardín, añade a ese suelo abonos orgánicos para que tenga la mejor condición posible. Existen diferentes tipos de sustratos orgánicos como los de origen natural que son los que están sujetos a descomposición biológica y los residuos que proceden de actividades agrícolas. Aunque estos últimos tienen que pasar por un proceso de transformación para que puedan usarse correctamente como sustratos.
En cambio, si vas a cultivar en macetas porque no dispones de este espacio, necesitarás una mezcla de tierra adecuada para el crecimiento de tus plantas. Puedes comprar mezclas de tierra especiales para crear tu propia mezcla de tierra utilizando la tierra de jardín, abono y perlita.
Además, en cuanto a las macetas, debes asegurarte de que sean lo suficientemente grandes para que tus plantas crezcan adecuadamente y de que tengan un buen drenaje para evitar la acumulación de agua. También tendrás que fijarte en los materiales de las macetas. Los más adecuados son el plástico, la cerámica o la arcilla.
O también pueden ser una gran opción las mesas de cultivo. En el mercado las puedes conseguir de tamaños, colores, diseños diferentes para adaptarse perfectamente a lo que estás buscando.
4. Planta tus semillas
Si estás plantando semillas, sigue las instrucciones que vienen en su paquete para la profundidad y la distancia adecuadas entre las semillas.
Si es tu primera vez en esto del cultivo, puedes comenzar cultivando plantones. Los plantones son plantas que ya están germinadas y un poco desarrolladas. De esta forma no empezarás de cero sino que te quitarás la fase más difícil del crecimiento de las plantas.
5. Riega y fertiliza regularmente
Asegúrate de regar tus plantas regularmente para mantener el suelo húmedo. Especialmente si plantas tu huerto en el suelo tendrás que prestarle una mayor atención ya que absorbe más rápidamente el agua que en recipientes como las macetas. Y, también tendrás que ajustar este riego en función de la época del año en la que te encuentres y en las plantas que hayas decidido cultivar.
Hay muchos tipos de riegos distintos. Lo puedes hacer de forma manual con una manguera o regadera perfectos para huertos pequeños. En cambio para huertos de mayor tamaño, la opción ideal son los sistemas de riego por goteo con programador con los cuáles podremos controlar exactamente cuál será el caudal de riego y cada cuanto queremos que riegue.
Por otro lado, necesitarás fertilizar tus plantas también de forma regular para que reciban los nutrientes necesarios. Puedes usar abono orgánico o fertilizante comercial para ello.
6. Mantén tu huerto limpio y protege tus plantas de las plagas
La limpieza es otro aspecto importante. Mantenlo limpio, libre de maleza y ve revisando de vez en cuando tus plantas para detectar si existe algún tipo de enfermedad o plaga. De esta forma lo podrás tratar más rápidamente y así evitar su propagación.
Las enfermedades son complicadas de detectar, cuando lo vamos a notar es viendo los efectos de la enfermedad. Para protegerlas deberás utilizar buenos abonos orgánicos. En el caso de que tengas plantas afectadas, habrá que deshacerse de estas plantas o al menos de esas partes dañadas. De esta forma, podremos evitar que se propague al resto del huerto.
Por otro lado, en cuanto a las plagas, son más fáciles de ver ya que observamos justamente al agente que está causando el problema. Pueden ser por pulgones, hormigas, cochinilla, araña roja, caracoles y babosas… Las soluciones para controlar este tipo de plagas en primer lugar pasa por identificar la especie de insecto que se va a combatir y, a partir de ahí, utilizar productos específicos antiplagas.
Para mantener tu huerto en casa en óptimas condiciones, necesitarás algunas herramientas de jardín básicas. Algunas de ellas pueden ser las siguientes:
- Guantes de jardinería.
- Pala y rastrillo.
- Tijeras de podar.
- Regadera o manguera de jardín.
- Escoba y recogedor de jardín.
Estas herramientas te ayudarán a preparar el suelo, plantar y cuidar tus plantas, así como mantener tu huerto limpio y ordenado.
7. Disfruta de tus cosechas
Montar y mantener un huerto en casa puede ser todo un desafío. Es importante tener paciencia y perseverancia para superar los obstáculos que puedan surgir y para esperar a que tus plantas crezcan y maduren.
Pero una vez que tus plantas hayan crecido, ¡es momento de disfrutar de tus cosechas! Utiliza tus verduras y hierbas frescas en tus comidas y experimenta con nuevas recetas.
En Allzone te ayudamos a crear tu huerto en casa
Como puedes observar, no es una tarea muy difícil crear tu mini huerto en casa y menos si cuentas con la motivación y las ganas de tener uno. Puede ser una experiencia muy gratificante y para la que solo necesitas un poco de planificación y tener en cuenta los consejos anteriormente mencionados para tenerlo en perfectas condiciones.
Además, en Allzone te lo hacemos fácil ya que ponemos a tu disposición en nuestro amplio catálogo, todos los productos de jardín como jardineras y maceteros, invernaderos, compostaje, productos de cuidado del jardín… Todo lo que necesitas para ayudarte a comenzar. ¡Así que no dudes y empieza hoy mismo!