¿Quieres sembrar y cosechar frutas y verduras desde tu hogar? Son muchas las personas que les gusta tener su propio huerto y poder disfrutar de los alimentos que producen ellos mismos. Por ello, se animan a aprovechar un rincón de su hogar para dedicarlo a sembrar.
Las mesas de cultivo serán las estructuras que te ayudarán a llevarlo a cabo en el caso de que no tengas un terreno preparado donde poder hacerlo. En este post vamos a darte toda la información que necesitas sobre las mesas de cultivo.
Mesa cultivo: crea tu espacio de cultivo ideal
Las mesas de cultivo son estructuras de aproximadamente 20 cm de profundidad, fabricadas con materiales como la madera o el metal. Suelen tener cuatro patas y varios cajones en los que se coloca el sustrato y se plantan las semillas. Por lo que son recipientes perfectos para cultivar de forma cómoda desde casa.
Existen en el mercado variedad de mesas de cultivo con diferentes medidas por lo que se adaptan a la perfección a cualquier persona.
Aparte de la comodidad mencionada anteriormente, algunas de las ventajas de tener una mesa cultivo son las siguientes:
Solidez. Son estructuras sólidas, resistentes y robustas debido a que tienen que soportar mucho peso.
Comida natural. Puedes controlar perfectamente todo el proceso por el que pasa el alimento que posteriormente vas a comer. Son productos saludables y ecológicos.
Orden. Puedes mantener todas las plantas totalmente organizadas.
Limpieza. La limpieza es más sencilla que si plantas en maceteros.
¿Qué tipos de mesa de cultivo existen?
En el mercado podrás encontrar diferentes tipos de mesa de cultivo como:
- Las verticales. Destacan por su aspecto decorativo. Incluyen varios cajones con diferentes volúmenes.
- Las camas de cultivo. Ofrecen una grane extensión para cultivar todo lo que desees. Son perfectos para crear un huerto al ras del suelo como por ejemplo en el césped.
- Los cajones de cultivo. Su altura es similar a la de una jardinera. Es ideal para garantizar que cada tipo de vegetal crece sin problemas ya que ofrece diferentes compartimentos.
¿Qué aspectos tener en cuenta a la hora de comprar una mesa de cultivo?
Las medidas
Lo primero que hay que decidir es la altura y tamaño que queremos que tenga nuestra mesa cultivo. Tenemos que prestar atención por ejemplo a quién lo va a utilizar. En el caso de que la persona vaya en silla de ruedas o sea un niño, el tamaño deberá ser menor. Y también si disponemos de poco espacio en nuestro hogar, optaremos por una mesa de cultivo acorde al espacio.
La luz solar
La luz del sol es imprescindible para tu mesa de cultivo ya que las plantas necesitan muchas horas de sol al día para que crezcan correctamente. Por ello se recomienda colocar los cultivos hacia el sur o suroeste.
En el caso de que no haya mucha luz en el espacio en el que lo vas a colocar, puedes optar por cultivar plantas que no requieran de tantas horas al sol.
El mantenimiento
No requiere de mucho mantenimiento, pero, por ejemplo, si está hecha de madera hay que intentar que no se moje para que el material siga siendo resistente.
Las parcelas
Si quieres cultivar vegetales con necesidades diferentes en cuanto al agua, luz, etc. la mesa de cultivo perfecta será aquella que disponga de parcelas. De esta forma, se pueden agrupar los cultivos que tengan las mismas necesidades.
El material
Las de madera son las más comunes y además aportan un extra en decoración. Requieren de una tela geotextil para su parte interior ya que sino la tierra escaparía por los espacios de la madera. Su desventaja es el mantenimiento. También puedes encontrar mesas de cultivo de plástico muy populares. Los hay de diferentes tamaños y colores, son muy ligeras, fáciles de instalar y no requieres apenas mantenimiento.
Finalmente, las mesas de cultivo metálicas son las menos populares, aunque cuenta con ventajas como su durabilidad y rigidez, su facilidad para instalar y que no necesitan mantenimiento.
Otras consideraciones
Una vez has elegido tu modelo ideal, ten en cuenta estas consideraciones para que tengas un cultivo fértil:
Sustrato. Las mesas de cultivo, por lo general, usan sustratos preparados que dan soporte y nutrientes a las plantas. Los que se aconsejan son el humus de lombriz o fibras de coco.
Tamaño de las plantas. Hay algunas plantas que necesitan un espacio más amplio para desarrollarse bien.
Abono. Debes prestar atención a que hay que enriquecer a las plantas con abono con frecuencia y puedes usar los residuos orgánicos de tu cocina para una plantación más natural todavía.
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